Esto se debe, en buena medida, a dos beneficios fundamentales que tiene este fruto del tomate: tiene propiedades cicatrizantes, por lo cual es muy recomendable para tratar heridas o quemaduras superficiales.
Por otra parte, como hemos señalado, la pulpa del tomate tiene propiedades hidratantes. Así es como, debido a esto, su aplicación para tratar la sequedad de la piel que se genera tras las quemaduras puede resultar beneficiosa.
Una buena manera de realizar un remedio casero con tomate para las quemaduras es tomar la pulpa del mismo y procesarlo en la batidora conjuntamente con el interior de un tallo de aloe vera o sábila, otra planta muy beneficiosa para este tipo de cuestiones. A continuación, se aplica sobre la zona afectada y se deja actuar unos 15 minutos antes de retirar suavemente con agua fría.
Recuerda también, cuando has tenido quemaduras, beber mucha agua para mantener tu cuerpo con la hidratación necesaria. Asímismo, no dudes en consultar a tu médico si te parece que tu problema (ya sea por exposición al sol u otro factor) puede ser importante.
