Propiedades depurativas de la remolacha

Un vegetal genial para limpiar el organismo

En los días posteriores a las fiestas de fin de año y navidad, la depuración se impone por goleada. Desintoxicarse de la mano de algunos vegetales es una gran opción. ¿Por qué no hacerlo con la remolacha?

La remolacha o betabel es un vegetal que todo lo tiñe, que con su coloración morada no deja a nadie que tenga al lado de modo indiferente. A muchos no les agrada su sabor terroso, algo dulzón. A otros, por contrario, los enloquece. Sus propiedades son realmente muy notables e interesantes, más allá de las cuestiones de sabor que puedan aplicársele. Sobre todo su gran capacidad depurativa y desintoxicante.

Consumir mucha remolacha después de estas fiestas (y de cualquier día de excesos en general) puede resultar muy provechoso. Y en más de un sentido, ya que tiene una acción que no se queda únicamente en la activación de la digestión y la agilidad intestinal, sino que incluso podría decirse que es bastante más integral.

Estas son las principales propiedades de la remolacha, betabel o betarraga para depurar el cuerpo:

Tiene una interesante cantidad de fibra dentro de su composición. Esto ayuda a depurar el organismo, activando el tránsito intestinal y dando una importante mano para eliminar toxinas del cuerpo.
También es diurética, razón por la cual siempre vendrá bien para estimular la eliminación de líquidos retenidos, otra de las constantes en estos períodos donde hay que desintoxicarse.
Por otra parte, tiene una buena acción metabólica. De esta forma, también trabaja sobre la digestión y sobre la depuración hepática.

Puedes emplearla rallada cruda en ensalada (queda de maravillas junto a un poco de tomate y cebolla) o también utilizarla en batidos. Un zumo que resulta muy bien para depurar es el de remolacha con zanahoria y naranja, por ejemplo, perfecto para aquellos que tienen extractor de zumos en sus hogares. Cocida, la puedes tomar al vapor y luego cortada en cubos o incluso asarla al horno para comerla como guarnición. Como si fueran patatas o cualquier vegetal horneado.